Estos días más que nunca empecé a sentir ese aburrimiento de hacer todo, ya pocas cosas me llaman la atención, siento como que mis pilas se hubieran agotado, talvez sea la edad. Creo que perdí la pequeña chispa que había en mí, pero todo esto no es extraño, talvez nací para vivir y sentir así.
No se si a muchas personas les pasa que se despiertan y piensan que el día será igual que ayer, sin muchas emociones y pasaran cosas que no van a cambiar nada de nada; o peor aun tener que sobrevivir el día haciendo tonteras que nunca te gustaron y esperar la noche para poder descansar y seguir soñando.
Ahora mas que nunca se me vino a la mente esa frase de la canción “tenes que hacer lo que el corazón diga” de los enanos verdes - aun sigo cantando; pero no es tan fácil, en el camino van pasando muchas cosas y a medida que pasan los años es mas difícil tomar decisiones que cambiaran el rumbo del “destino”.
Y hacer música sin recibir mucho apoyo es mas difícil aun, pero las cosas se ponen peor cuando vives en un país donde todo lo que pasa es superficial y nada llega a ser trascendental; tiene mucho que ver con la globalización, el Internet, TV cable celulares y demás. La gente ya no te tira pelota si haces algo bueno, te quita todo el merito o simplemente se olvida.
Es increíble y triste ver como cambiaron los tiempos en tan solo 20 años; cuando crear era algo especial y quedaba por mucho tiempo en la memoria, ahora nada de lo que hagas perdura; pero que se podría esperar de nuestra gente boliviana?
Pero sigo soñando, esperando y aportando de a poco, para que esta realidad cambie, talvez muera en el intento o me resigne a conformarme,… aunque pensándolo bien el chiste de la vida esta en vivir las sorpresas que nos depara el “destino”
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